El infierno que llevamos dentro: Lost y El Juego del Calamar.
Date
Jul 11, 2025
Category
Personal
He visto 'Lost' varias veces. Al principio me atrapó el misterio, la acción y la historia. Pero a medida que la volvía a ver su significado empezó a cambiar, la isla no solo era un lugar raro, sino un espejo de lo que los personajes traían dentro.
Con el tiempo entendí que la serie me estaba diciendo algo más profundo: que uno puede vivir el infierno en vida. Que no hace falta morir para atravesar un purgatorio. Que muchas veces nuestros miedos, culpas, y o frustraciones son los que hacen que un lugar —la isla, la vida, el presente— se convierta en algo casi insoportable. Porque hay personajes que cuando encuentran cierta paz interior, la isla los deja de perseguir. No es que 'se salvan', sino que ya no sufren. Como si el verdadero tormento no viniera del humo negro o de afuera, sino de adentro.
Y esa idea me quedó dando vueltas: que cada uno puede crear su propio infierno en la Tierra. Que las consecuencias de nuestros actos, no nos aguardan en un juicio final, sino que ya se manifiestan en cómo vivimos, en qué sentimos, en cómo tratamos a los demás.
Pasado un tiempo vi la serie 'The Squid Game'. Muy diferente en forma, pero para mí con un fondo que remite en cierto aspecto a algo similar. En la serie muchos personajes llegan al juego con una vida destruida o con heridas profundas. Y en efecto, al final algunos mueren en un estado de desesperación total, pero otros logran sentir una evolución. Algunos se cuestionan quiénes son, reconocen sus errores, su dolor, o su vacío... Y si bien inevitablemente mueren, se puede sentir que ya no son las mismas personas. Como si en medio de esa locura alcanzaran algún tipo de redención.
Y entonces comencé a hilar y llegué a una tercera reflexión, me planteé si el mensaje original del cristianismo, que es la religión que más conozco por dentro, no iría en esta misma dirección. ¿Y si tal vez no se tratara de una promesa de un cielo después de la muerte, de la amenaza de un infierno eterno o de algo material?. Sino de enseñarnos a vivir mejor acá. A aceptar el sufrimiento sin permitir que nos consuma, a amar más y a juzgar menos. A crecer como humanos en este breve lapso de tiempo, de manera a que el último día, llegara en paz y no en un estado de miedo o desesperación.
Quizás ese sea el verdadero “cielo”: morir en paz, tratar de entender lo que realmente importa, cambiar nuestro entorno a través del cambio interno. Amar aunque sea un poco más que ayer.
En ocasiones una serie puede ser solo entretenimiento pero hay otras veces en que puede reflejarnos algo. Y cuando eso ocurre, es bueno prestarle atención. No sé si para alguien tendrá sentido todo esto.